El loco Stevie
- Martín Anguita
- 2 oct 2019
- 1 Min. de lectura
Ay, Stevie! Pequeñito escurridizo, de esos que caza ratones a pata pelada. No conoce lo que es el miedo. Se para de frente ante cualquier. Es libre, tanto que cuando jugamos le encanta usar la pared de concreto como aliado. Para el no hay límites, y cuando digo límites no digo a lo aspiracional, sino a que simplemente no los tiene, aún cuando la cancha tiene sus marcaciones bien definidas.
Coach! ¿Me regalaría sus zapatos? Respetuoso, sin embargo, esto no le quita lo pícaro. Pareciera como si fuese desordenado e irreverente, pero es más bueno que cualquiera. Es uno de los primeros en llegar. Ves que llego, al primero que me topo es a Stevie.
Es uno de los fijos en el 10 inicial. Acá jugamos de 10 por lado. La cancha debe ser como para 6 por lado, pero todos los días llegan 50 niños queriendo patear esta esférica, por lo que tenemos que hacer lo imposible, poner y hacer jugar a todos. A eso vinieron.
Me duele que quieran ser futbolistas.

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